jueves, agosto 14, 2025

Óscar Bonifacino: el primer boxeador profesional abiertamente gay de Latinoamérica

📝 Las opiniones expresadas en este artículo son responsabilidad exclusiva de quien lo firma y no reflejan necesariamente la postura de Revista Rainbow. Asimismo, Revista Rainbow no se hace responsable del contenido de las imágenes o materiales gráficos aportados por les autores, colaboradores o colaboradoras.

Publicidad

A veces las historias más potentes no empiezan en un gran escenario, sino en un lugar donde el futuro parece reducido a sobrevivir el día a día. Óscar Bonifacino, boxeador profesional uruguayo de 21 años y el primer abiertamente gay de Latinoamérica, sabe bien lo que es luchar, y no solo contra sus rivales en el ring.

Debutó como profesional hace apenas unos meses, pero su nombre ya resuena más allá del deporte. En junio participó en el festival KO a las Drogas, organizado por la Asociación Mundial de Boxeo en Buenos Aires. No fue su primera victoria, pero sí uno de esos momentos que marcan carrera: subió al cuadrilátero luciendo una faja con los colores de la bandera arcoíris. No lo hizo para provocar, sino para decir en voz alta algo que durante años calló: es gay, y no tiene intención de esconderlo.

De una infancia dura a un sueño en el ring

Creció en el asentamiento Mario Benedetti, en Maldonado, en un hogar marcado por la violencia y la ausencia de afecto. “Nunca tuve el cariño de mi familia”, reconoce. En la adolescencia, la inseguridad y el dolor lo llevaron a tomar caminos peligrosos, hasta que su cuñada Jacque lo llevó a un gimnasio. Allí, con los guantes puestos, descubrió que podía canalizar su rabia y su energía en algo que no lo destruyera.

Publicidad

Su progreso fue meteórico: apenas un mes después de su primer entrenamiento ya competía como amateur. La entrenadora Elizabeth Cabrera no solo afinó su técnica, también le abrió las puertas de su casa y de su confianza. Fue a ella a quien le confesó, después de mucho tiempo, que era gay. “Mi padre me pegaba para ‘enderezarme’. Yo bloqueé esa parte de mí durante años”, recuerda.

 

Orgullo, libertad y golpes limpios

Desde que salió del armario, dice sentirse “feliz, completo”. Terminó su etapa amateur con un brillante récord y el segundo puesto en el Campeonato Latinoamericano Amateur del CMB en 2024. En 2025 dio el salto al profesionalismo con dos victorias consecutivas, la última en el festival porteño.

- Advertisement -

Pero para Bonifacino, ganar combates es solo parte de la misión. “Quiero que nadie tenga que ocultarse. La fuerza nace del corazón, no del miedo”, afirma. Su presencia y discurso incomodan a quienes ven el boxeo como un espacio reservado para la masculinidad más rígida. Y es precisamente ahí donde radica su impacto.

Un referente en un deporte que aún debe cambiar

Su promotor, Sampson Lewkowicz —conocido por trabajar con leyendas como Manny Pacquiao o Sergio “Maravilla” Martínez— asegura que Bonifacino tiene un futuro brillante. Más allá de los títulos, lo ve como un ejemplo de coraje para deportistas que, por miedo al rechazo, siguen ocultando quiénes son.

Perspectivas críticas: ¿cambio real o excepción puntual?

El caso de Bonifacino invita al optimismo, pero también plantea dudas. ¿Hasta qué punto su historia es señal de un cambio estructural en el boxeo y no solo una excepción que confirma la regla? La homofobia en el deporte no desaparece de un día para otro, y la visibilidad conlleva riesgos reales: desde el rechazo del público hasta el aislamiento dentro de los propios equipos. Sin un compromiso más amplio de federaciones, medios y patrocinadores, la lucha de Bonifacino podría quedarse como un gesto valiente, pero solitario.

Publicidad
Publicidad

Top 5 Esta Semana

Post relacionados

Publicidad
Publicidad
Julian L.
Julian L.https://revistarainbow.com
Soy periodista porque creo que las noticias deben abrazar a quien nunca tuvo voz. Vivo entre titulares, manifestaciones y cafés compartidos. Me inspiro en Pedro Lemebel, y sueño con haberle entrevistado en otra vida. Mi pluma intenta contar el mundo como podría ser, no solo como es. Dato curioso: Mi récord personal son 12 cafés en un solo día cubriendo el Orgullo… y aquí sigo, vivito y coleando.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Novedades