En los últimos años, OnlyFans se ha convertido en una de las plataformas más populares para crear y consumir contenido exclusivo. Desde arte hasta fitness, y sí, también contenido para adultos, la plataforma ha abierto nuevas puertas de independencia económica, visibilidad y expresión. Pero, como todo en internet, no es oro todo lo que reluce. ¿Qué riesgos implica tener un perfil activo en OnlyFans? ¿Qué hay más allá del dinero y la fama?
Exposición pública: cuando lo privado se vuelve viral
Uno de los riesgos más evidentes es la pérdida de control sobre la propia imagen. Aunque el contenido se publica bajo una suscripción, nada impide que alguien tome capturas o grabe videos y los difunda sin consentimiento. Una vez que tu contenido está en línea, es casi imposible borrarlo por completo. Esto puede tener repercusiones en tu entorno familiar, laboral o incluso legal.
Además, muchas personas desconocen que su participación en este tipo de plataformas puede acabar apareciendo en motores de búsqueda, redes sociales o foros no deseados. El anonimato es frágil en el mundo digital.
Estigmatización social: prejuicios que aún pesan
Aunque vivimos en tiempos más abiertos, los prejuicios siguen presentes. Contar con un perfil en OnlyFans, sobre todo si incluye contenido sexual, puede provocar rechazo, discriminación o bullying, tanto online como offline. Muchas personas pierden oportunidades laborales, relaciones personales e incluso apoyo familiar al descubrirse su presencia en esta red.
¿Estamos realmente preparados como sociedad para aceptar la diversidad de formas en que las personas deciden ganarse la vida?
Salud mental: la otra cara de la monetización
La presión por generar contenido constante, mantener suscriptores y lidiar con comentarios (no siempre amables) puede afectar la salud mental. Burnout, ansiedad, comparación constante con otres creadores y la autoexigencia son algunos efectos secundarios comunes.
También hay un componente de dependencia económica. Cuando alguien empieza a ganar dinero a través de OnlyFans, puede ser difícil abandonar la plataforma, incluso si ya no se siente cómodo/a o segura haciéndolo. ¿Dónde está la línea entre empoderamiento y presión?
Riesgos legales y fiscales
Muchas personas que inician un perfil en OnlyFans desconocen las implicaciones legales o fiscales de esta actividad. Hay que declarar los ingresos, pagar impuestos y cumplir con ciertas normativas según el país de residencia. No hacerlo puede traer consecuencias económicas graves.
Por otro lado, hay legislaciones específicas respecto a la difusión de contenido para adultos. Si no se cumplen ciertas condiciones legales, podrías enfrentarte a sanciones o procesos legales. Siempre es recomendable informarse bien o consultar con profesionales.
Relaciones personales: el impacto en la intimidad
Otro punto delicado es el efecto que tener un perfil en OnlyFans puede tener sobre las relaciones de pareja o familiares. No todes lo aceptan, y en algunos casos esto puede generar conflictos serios. La comunicación clara y el consentimiento son claves si hay una relación afectiva en juego.
Además, no es raro que la exposición pública genere acoso o propuestas no deseadas, lo cual también repercute en la vida personal de quien crea contenido.
Seguridad digital: un riesgo latente
Desde hackeos hasta filtraciones masivas, la seguridad digital es una preocupación constante para quienes usan OnlyFans. No es suficiente con tener contraseñas fuertes; es importante proteger datos bancarios, identidad e incluso ubicación.
En algunos casos, personas con malas intenciones han usado información pública de creadores para acosarles o chantajearles. Esto es más común de lo que parece.
¿Y si hablamos de interseccionalidad?
No todos enfrentan los mismos riesgos. Las personas LGTBIQ+, racializadas o con cuerpos no normativos suelen estar más expuestas a la violencia digital, discriminación o explotación. La plataforma puede ser una fuente de libertad, sí, pero también de vulnerabilidad.
Entonces, ¿cómo equilibrar la autonomía con la seguridad y la salud emocional? ¿Qué papel tienen las plataformas como OnlyFans en la protección de sus usuarios?
Mirada crítica: ¿realmente es tan libre como parece?
Aunque OnlyFans se presenta como una forma de empoderamiento, también hay quien lo ve como parte de un sistema que sigue beneficiándose del deseo ajeno y del cuerpo de otras personas. ¿Es realmente una elección libre si está motivada por necesidad económica?
Algunos colectivos feministas y activistas cuestionan si la popularización de estas plataformas está normalizando una mercantilización del cuerpo que perpetúa desigualdades, en lugar de desafiarlas. Es un debate abierto, y cada experiencia es distinta.
Elegir con conciencia
Tener un perfil en OnlyFans no es ni bueno ni malo por sí mismo. Como casi todo en la vida digital, depende del contexto, de las motivaciones y del nivel de información con que se toma la decisión. Lo importante es que quien elige este camino lo haga con plena conciencia de los pros y los contras, y sepa dónde buscar apoyo si las cosas se complican.
La libertad digital también necesita límites, cuidados y acompañamiento. Y ahí, como sociedad, todavía tenemos mucho que mejorar.