Angel Brown, quien muches conocían como la persona que Melanie Brown (sí, Mel B de las Spice Girls) tuvo con el actor Eddie Murphy, ha compartido públicamente su identidad como hombre trans. Con 18 años recién cumplidos, Angel ha actualizado sus pronombres a “él” en su perfil de Instagram, un gesto simple, pero profundamente significativo.
Un paso firme, sin grandes anuncios
No hubo declaraciones grandilocuentes ni vídeos virales. Ni entrevistas exclusivas. Nada de eso. Angel simplemente actualizó su biografía en Instagram. A veces, visibilizarse es así de sencillo, y así de poderoso.
Aunque no se hizo un evento especial, según una fuente cercana citada por el Daily Mail, tanto Mel B como Eddie han mostrado su apoyo incondicional: “Es una decisión que tomó Angel y Mel ha sido comprensiva, al igual que Eddie”. Y, honestamente, ese respaldo familiar marca la diferencia.
Un poco de contexto: la historia entre Mel B y Eddie
Puede que muches no recuerden que Mel B y Eddie Murphy tuvieron una breve relación allá por 2006. De ahí nació Angel. En su momento, la paternidad fue motivo de conflicto (y portadas), pero con el tiempo todo se aclaró. Eddie reconoció a Angel como su hije y, desde entonces, la relación se normalizó.
Angel es uno de los diez hijos que tiene el actor con distintas parejas. Mel B, por su parte, es madre de tres criaturas, también con diferentes padres. Y ahora, su hijx del medio está dando este paso valiente.
¿Qué significa salir del armario siendo parte de una familia famosa?
Hay que reconocer que visibilizarse siendo parte de una familia tan mediática no es tarea fácil. Más allá del apoyo familiar —que no todes tienen—, la presión pública y el escrutinio constante pueden convertir una decisión íntima en algo abrumador. En ese sentido, que Angel haya hecho este anuncio de forma tranquila y a su ritmo es también una manera de tomar control de su narrativa.
Sin embargo, este tipo de noticias siempre abren una puerta a reflexiones más profundas. ¿Qué papel juegan los medios? ¿Es posible transitar una identidad con calma cuando cada paso puede acabar en los titulares de tabloides? ¿Respetamos lo suficiente el tiempo y los ritmos de las personas trans?
Luces y sombras del apoyo mediático
Aunque celebramos que Angel tenga el respaldo de su familia, no todo es color de rosa. El hecho de que su historia llegue primero a través del Daily Mail —un medio no precisamente ejemplar en su trato hacia personas LGTBIQ+— puede hacer sonar algunas alarmas. ¿De verdad fue decisión de Angel compartirlo ahora? ¿O el relato ha sido en parte moldeado por terceras personas?
Además, hay que tener cuidado con cómo se presentan estas historias: no basta con usar los pronombres correctos si el enfoque sigue siendo sensacionalista o centrado en detalles que poco aportan a la visibilidad real. La identidad de Angel no debería reducirse a su árbol genealógico ni al número de hijos de sus padres.
Cada historia trans es única. A veces se vive en silencio, otras en voz alta. Lo importante es que sea vivida con dignidad y libertad. Que Angel haya dicho “soy él” a su manera, sin necesidad de explicarse demasiado, es una muestra de que los cambios más importantes empiezan por dentro.
Y para nosotres, como sociedad, queda seguir preguntándonos: ¿estamos preparades para acompañar esos procesos sin convertirlos en espectáculo?